De la tecnología Blockchain podría nacer una nueva era para el transporte aéreo no tripulado basado en drones descentralizados. Con eso, los vuelos de estos aparatos serán más controlados y, con ello, se fortalecería la capacidad de seguridad.
Desde que la cadena de bloques salió a la luz hasta el presente, demostró las grandes capacidades de brindar seguridad. Y estas cualidades son aplicables a una gran variedad de industrias que van desde la medicina, el comercio, la educación e incluso el Metaverso.
Las propiedades de esta tecnología la convierten en la única capaz de crear un sistema tecnológico robusto en todas las áreas. Las capacidades de la cadena de bloques son tan fuertes que las criptomonedas más antiguas como Bitcoin o Litecoin jamás han tenido problemas de seguridad.
Partiendo de las capacidades demostradas por ese libro mayor, los casos de uso son cada vez más variados.
La idea de la Blockchain y los drones descentralizados
Es conocido que los vehículos voladores no tripulados andan sin ningún tipo de control por los aires. Asimismo, la tecnología los hace cada vez más versátiles y capaces. El problema de esto es que en manos de criminales pueden utilizarse para diversas actividades que ponen en peligro a las personas.
No obstante, la blockchain se presenta como una solución con los denominados drones descentralizados. Con la ayuda de esta tecnología, las empresas podrían llevar un registro transparente de las actividades de sus equipos. En ese sentido, se evitaría que los mismos se usen para recopilar datos de los usuarios.
Esto último es solamente un pequeño ejemplo de las posibles ventajas de la aplicación de la cadena de bloques. En todo caso, la falta de transparencia y trazabilidad serían cosa del pasado. Bajo el paraguas de la tecnología, cada actividad de los drones, como tomar fotos, hacer una entrega o una inspección, quedarían grabadas en la red.
Por otro lado, se facilitarían los trabajos considerando que los equipos que se conecten a la red pueden cumplir tareas de manera automatizada. Así, con la ayuda de contratos inteligentes, una empresa sería capaz de automatizar sus servicios para hacerlos más eficientes y menos expuestos a errores humanos.
En palabras cortas, la blockchain y los drones descentralizados es una forma de evolución que podría significar mucho para la cadena de suministro.
La característica de seguridad definitiva
Uno de los elementos que facilitan el trabajo de los órganos de justicia y policiales es la identidad individual de cada persona. Esto se podría aplicar a los drones descentralizados por medio de la blockchain sin la necesidad de la costosa infraestructura del Estado. Básicamente, cada equipo tendría una identidad propia basada en la red y sería ubicable en tiempo real.
Entre los aspectos que esto solucionaría es el uso no autorizado para vulnerar a otras personas y también se evitaría el robo de drones. De igual manera, se pueden proteger los datos, dado que la cadena de bloques permite dar propiedad a las imágenes, videos y otros datos obtenidos por cualquier vehículo no tripulado.
Esto último tiene una importancia sobresaliente en áreas como la agricultura, la inspección de infraestructuras y la gestión de desastres. Incluso en áreas como la guerra o zonas de ataques serían vitales. Vale la pena mencionar que para este tipo de contingencias es fundamental la integridad de los datos, sobre todo considerando la capacidad de la IA para generar imágenes fake.
«La blockchain ha creado un sistema más seguro y confiable que ayuda a aumentar la popularidad de los drones para el uso general», afirmó el año pasado el experto Milton López en una publicación.
Con esto, en perspectiva, la masificación de los drones descentralizados se convierte en una realidad potencial gracias a la blockchain. Las empresas dejarán de temer sobre las consecuencias de la adopción de este sistema.
Otro tipo de ventajas
Para las compañías basadas en comercio y delivery, la blockchain y los drones descentralizados se convierten en una bendición. Asimismo, el asunto se convierte en un ganar-ganar porque también beneficia el entorno en el que se desarrolla el negocio de esas compañías.
Por ejemplo, un importante número de empresas grandes sustituirían su flota de vehículos de transporte terrestre por drones. Con ello lograrían disminuir los costos operativos que eso le acarrea, como pagos a los conductores, mantenimiento de los camiones y otros.
Al mismo tiempo, sería de gran beneficio a la hora de disminuir la emisión de gases de efecto invernadero hacia la atmósfera. Aunque esta tarea también la cumplirían los coches eléctricos, los drones acortarían los tiempos de las entregas y convertirían la cadena comercial en algo más dinámico. Al final, esto sería un impulsor para el crecimiento de la economía.
